Asun Millán: "Me gusta pasar el día en la obra, estar al aire libre, ver el movimiento, trabajar en equipo"
Esta zaragozana casi siempre ha estado vinculada a trabajos donde tenía que conducir algún tipo de vehículo. Así llegó a la construcción y conoció a la que ahora es su acompañante en el día a día: la retroexcavadora
Asun tiene 56 años. Ha trabajado en todo tipo de sectores: restaurantes de comida rápida, hoteles, repartiendo libros, conduciendo autobuses, haciendo encuestas de casa en casa, en Correos... incluso cruzó el Atlántico y se fue a Argentina para empezar en una empresa de ingeniería. La mayoría de sus trabajos han tenido que ver con la conducción de algún tipo de vehículo: moto, autobús, cosechadora... y ahora retroexcavadora. Hemos hablado con ella para conocer más sobre su historia.
Pregunta: ¿Cuándo fue tu llegada a la construcción?
Respuesta: Llegué en 2001 y estuve hasta la crisis de 2008. Ahí me tuve que buscar la vida en otros sectores. Pero en junio de 2021 pude volver a la construcción y actualmente trabajo en Domec, una empresa de Huesca que opera en Zaragoza.
P: La construcción tiene muchas profesiones, ¿por qué te decantaste por la maquinaria retroexcavadora?
R: Porque a mí siempre me ha gustado conducir todo tipo de vehículos. He llevado motos, autobuses, cosechadoras... casi todos mis trabajos han tenido que ver con la conducción. Y ahora estoy con la retroexcavadora, que no solo es conducir, es mover el "cazo" para sacar la tierra, hacerlo en línea recta... Y mientras pueda subirme a las máquinas, seguiré en ellas.
P: ¿Qué formación has recibido en la Fundación Laboral de la Construcción y cómo ha sido la experiencia?
R: El primer curso que hice en la Fundación fue en 2005. Allí también hice los perfeccionamientos de maquinaria de retroexcavadora y todo lo relativo a prevención de riesgos laborales. Fue una experiencia muy buena, tienen muy buenas instalaciones, los profesores son muy buenos y las prácticas muy útiles.
P: En tu trayectoria profesional, ¿has conocido a muchas mujeres que desempeñen tu puesto de trabajo? Y en general, ¿conoces a mujeres que estén trabajando en la construcción?
R: En todos estos años sí he visto a mujeres trabajando en construcción, llevando camiones en las obras. Yo no he coinicidido con ninguna, aunque sé que hay muchas mujeres que llevan maquinaria. Con lo que más me he encontrado ha sido con mujeres ingenieras y de prevención de riesgos laborales, aunque también he tenido una jefa de obra antes del 2008.
P: La cifra de mujeres trabajando en la construcción está en un 9,6 %, un número que crece pero muy lentamente. ¿Qué crees que hace falta para que este número se incremente: cambio de mentalidad en el sector o mujeres decididas a introducirse en este tipo de trabajos?
R: Creo que tiene que haber un cambio de mentalidad por parte de los hombres y por parte de las mujeres. Ellas tienen que perder el miedo porque lo de "la construcción es un trabajo de hombres", lo piensan los hombres, pero también las mujeres. Tenemos que perder el miedo y saber que es un sector interesante. Un sector que tiene sueldos superiores con convenios mejores que los del comercio, limpiadoras o cuidadoras. También tenemos más fiestas y mejores sueldos. Y es algo que no saben.
Ya no se puede decir "qué dura es la construcción". A día de hoy, tenemos muchas máquinas que nos facilitan el trabajo y precisamente los maquinistas evitamos mucho trabajo duro.Yo estoy encantada con el sector y con mi trabajo.
P: En tu caso, ¿tuviste dudas de lanzarte al sector por el hecho de ser mujer?
R: Yo no porque soy muy decidida. He aprendido en estos años que para lograr lo que quieres tienes que dedicar muchas horas, como pasa en cualquier sector. He tenido suerte porque siempre mis jefes han tenido paciencia y así es como he ido aprendiendo.
P: ¿Por qué te has quedado en la construcción?
R: Este trabajo me ha dado independencia y resolución. Soy muy resolutiva ahora en todo. Me gusta pasar el día en la obra, estar al aire libre, ver el movimiento, es un trabajo de equipo. Siento que evito trabajo a otros y me siento muy útil. Una de las cosas que más me gusta es que al final del día puedo ver en lo que he avanzado, se ve fácilmente cómo se van cumpliendo los objetivos. No hay una rutina fijada y eso hace el trabajo mucho más ameno. Además me gusta el ambiente, conoces a mucha gente y se viaja por muchos pueblos de la zona.
P: ¿En qué puede mejorar la construcción?
R: Respecto a nosotras, hay que trabajar sobre todo en los EPI's: solo hay zapatos a partir del 42, los pantalones son de hombre, porque solo tienen XXL... tardan semanas en traer tallas más pequeñas.
P: Formas parte del ‘Programa Embajadores’ de Aragón, ¿en qué consiste y qué es lo que hacéis?
R: Es un programa a través del cual acudimos a los institutos para hablar a los jóvenes sobre las diferentes profesiones a las que pueden acceder. Y ahí es cuando les hablamos de la Formación Profesional en construcción. Les contamos nuestra experiencia y cómo es el sector. En mi caso les hablaré de mi persistencia, incidiré en lo que más me gusta, que es el trabajo en equipo y lo divertido que me resulta conducir la máquina.
P: ¿Cómo trataréis de dar a conocer a los jóvenes el sector quitándoles esa imagen distorsionada o equivocada que tienen de la construcción?
R: Les explicaremos toda la maquinaria que hay y que nos ayuda a facilitar el trabajo, les hablaremos de las herramientas que empleamos y que nos ayudan en el día a día. Ya no es todo pico y pala.
P: ¿Qué balance haces de tu trayectoria en la construcción?
R: Yo estoy muy agradecida a todas las empresas que han confiado en mí. Siempre he tenido mucha faciilidad para encontrar trabajo. Todos los jefes han apostado por mí y hemos ganado tanto ellos como yo.
P: De cara al futuro, ¿cómo te gustaría seguir creciendo en el sector? ¿Piensas volver a formarte en alguna otra profesión dentro del sector?
R: Yo lo que quiero es seguir llevando máquinas. Si tengo que formarme en algo, no será en otra cosa, será en perfeccionamiento de retroexcavadoras grandes y aprender moto niveladora.